Es una planta suculenta con forma de roseta de hasta 30 cm de diámetro y con tallo de hasta 10 cm de logitud, por lo general simple, con hojas redondeadas, rojizas o verde oscuras, cubiertas por una pruina protectora que le confiere un aspecto azul-grisáceo, casi blanco, a la planta. Emite una inflorescencia de hasta 10 cm de longitud, de febrero a abril, con 9 a 17 flores de color rojo o rojizo pero con aspecto rosado debido a la capa pruinosa que las recubre. En sus gordas y redondeadas hojas posee gran cantidad de cera blanca para protegerse del sol. Cree que con el disfraz, no sabremos de que color es . . . . . sin su maquillaje ¡es rojiza!
Para su trasplante
Para su trasplante se debe tener especial cuidado de no tocar sus hojas (en general no se deben tocar), ya que al mas mínimo contacto le quitaremos su capa de cera protectora.
Aquí podemos ver a la Laui en su maceta que ya le queda pequeña
Primero preparamos la nueva maceta con un sustrato drenante al fondo, es este caso utilice tepojal
Con un palillo largo u otro instrumento similar aflojamos la tierra que esta alrededor, con cuidado de no tocar las hojas, vamos vaciando parte del sustrato fuera de la maceta y podemos usar este sustrato en el nuevo recipiente
Buscamos la forma de poder tomar la echeveria por la parte inferior para no molestar sus hojas
Antes de colocar la echeveria, cubrimos con una capa del nuevo sustrato, en este caso utilice:
20% Tepojal
50% Acícula de Pino
10% Perlita
15% Tierra de hoja
5% Humus de Lombriz
Colocamos la echeveria en su nueva maceta en la posición deseada y con alguna palita vamos rellenando a los lados sin soltar la planta hasta que esta pueda sostenerse por si sola
Listo!!!! Ya esta en su nuevo hogar!!
Un poco mas de esta belleza:
La Echeveria laui es una vegetal que sabe ahorrar, toda su vida acumula agua en sus tejidos para ser capaz de sortear las largas temporadas sin beber.
Se trata de una extraordinaria suculenta perteneciente al grupo de las crasuláceas, tiene 30 parientes y casi mil 500 primos hermanos.
Su delicado cuerpo en forma de roseta está constituido por casi 80% de agua y tiene apariencia carnosita, por eso de cariño la llamamos succus (suculenta).
Además, también sabe defenderse de los bichos, quienes al morderla o picarla ¡mueren al instante! Todos los años, entre febrero y mayo, nuestra estimada se engalana con bellos racimos de flores de tono rosado. Con el tiempo, esta coqueta roseta puede llegar a medir hasta 30cm de diámetro.
Reside en el Valle de Cuicatlán, en el estado de Oaxaca. A ella le gusta vivir en el clima semiárido, sin embargo, es muy vulnerable a la especie humana.